Durante muchos años se ha hablado de la
meditación como una práctica relacionada al bienestar, pero también tiene
fuertes asociaciones con diferentes religiones. Sin embargo, hace ya más de 50
años se ha estado investigando los beneficios de la meditación sobre el
bienestar en los seres humanos desde un campo más científico y empírico.
La meditación es un área realmente compleja
y profunda que engloba muchos tipos de meditación, filosofías que sustentan la
práctica y ritos que acompañan la experiencia.
Pero para este artículo nos hemos centrado
en la práctica de la meditación mindfulness específicamente. Si bien
originalmente este tipo de meditación proviene del hinduismo, es gracias al
doctor Jon Kabat-Zin, quien se dedicaba a trabajar con pacientes que sufrían
enfermedades terminales, que se empezó abordar desde un lugar que no implicaba
religiosidad.
Este doctor veía a sus pacientes sufrir de
tal manera y sin un pronóstico favorable que alentara la vida de estas
personas, que decidió buscar alternativas que les permitieran vivir de la forma
más plenamente posible su situación. Todas las personas merecemos una vida
digna y plena, aún en las peores circunstancias.
Gracias a este nuevo enfoque, desligado de
los componentes religiosos, se hizo posible implementar la meditación
mindfulness como técnica en el ámbito de la salud occidental, porque ya no se
trataba de una religión sino de una técnica que puede ayudar en tu salud
integral.
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